A medida que la tecnología sigue evolucionando, reconocemos la importancia de integrar la IA de una manera reflexiva y responsable para mejorar el aprendizaje, priorizando al mismo tiempo la seguridad, la privacidad y el pensamiento crítico de los estudiantes.
Mejora de las experiencias de aprendizaje: las herramientas impulsadas por la IA pueden proporcionar apoyo personalizado, ayudando a los estudiantes a aprender a su propio ritmo a través de plataformas de aprendizaje adaptativo, asistentes de tutoría y comentarios en tiempo real. La retroalimentación con IA, como Brisk, permite a estudiantes y profesores tener tiempo para mantener conversaciones específicas sobre el aprendizaje.
Apoyo a los profesores: la IA puede ayudar a los profesores automatizando las tareas administrativas, lo que les permite centrarse más en atraer y orientar a los alumnos.
Fomentar la alfabetización digital: nuestro objetivo es enseñar a los estudiantes a utilizar la IA de forma responsable, fomentando el pensamiento crítico y las consideraciones éticas en torno a la tecnología.
Nos comprometemos a utilizar la IA como herramienta de apoyo -no de sustitución- a la enseñanza humana, garantizando que el aprendizaje siga siendo interactivo, atractivo y centrado en el alumno.
